Estás en tu casa y alguien, a cientos de kilómetros de distancia, encuentra interesante tu trabajo. Así le ocurrió a Nicolás Ammi, quien tuvo además la curiosidad necesaria para acercarse al ordenador y pedirme permiso para utilizar uno de mis dibujos como portada para su álbum.
Yo estoy encantado de que cosas así ocurran, de que encuentros como éstos se produzcan.
Así que, por si alguien quiere también encontrárselo, aquí va el enlace que, ahora de vuelta, lleva hasta él.
Pinchad aquí.
Yo estoy encantado de que cosas así ocurran, de que encuentros como éstos se produzcan.
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